El alcalde, José Manuel Dolón, ha ordenado que se abra la calle La Sal y se urbanice en su totalidad, para resolver la que ha calificado como de "vergüenza pendiente". Este vial, situado detrás de la curva del palangre, se encuentra cerrado y forma parte de una actuación urbanística aprobada en 2010 sin que los promotores la hayan ejecutado.