Esperanza y Vida podría tener que cerrar a principios de 2012 si no mejora la situación económica. Su directora, Dulce Catalán, ha expresado hoy públicamente esta realidad, anunciado que ya han sido despedidas 4 personas, y que en caso de continuar en esta línea, esta ong que trabaja con drogodependientes podría no aguantar más allá de los meses de marzo o abril del próximo año.