La próxima semana, según el calendario de señalamientos de la sección penal de la audiencia de Alicante, se juzgará a un hombre acusado de poseer y distribuir material audiovisual de pornografía infantil. La investigación se inició en 2014 a partir del aviso de la Embajada de Estados Unidos en Madrid que alertaba de la distribución de material pedófilo a través de una red social por parte de un usuario de Internet, localizado en Torrevieja. En el registro a su domicilio se hallaron multitud de archivos, tanto fotografías como vídeos, en los que aparecían menores, de entre 1 y 12 años, sometidos a prácticas sexuales. El fiscal solicita una pena de siete años de prisión por presunto delito de corrupción de menores.